27 jun 2011

Amo a una mujer que no conozco...


Amo a una mujer que no conozco, pero de la cual podria delinear los ojos, los pliegues de los labios, estrechándose, copulando entre si para formar esa hermosa sonrisa que adorna su rostro cuando los buenos días llegan. No la conozco por voluntad mía, sino porque quizás la voluntad del tiempo, sea guardarnos para días de soles mejores, quizás porque un arcoiris se disfruta mejor con una suave llovizna que con un torrencial cayéndo sobre nosotros...Es esa vieja inercia que sostengo hacia lo prohibido, la que me acerca más a ella. Son sus silencios más profundos, los que me dicen más de lo que piensa. Quiero estrellarme contra su seno como huérfano hallando a su madre. Y es que no puedo distinguir si es de humo o de cristal, de deseo o anhelo mismo ese cuerpo que se desvanece cual ave huyendo del miedo, al breve contacto de mis extremidades trémulas y tiritantes de emoción. Hay días en que no puedo concebir su nombre, y otros más donde su piel se ha quedado tatuada en mis ojos, y su olor, permanece en mi nariz, y su recuerdo grabado como oración en mi memoria. La persigo queriendo nunca alcanzarla, volverla ideal, y revolverla, y dibujarla y retorcerla, perderla y descubrirla otra vez. Leerla como un libro y consumirla cual cigarrillo que alumbrara mis noches sin poder dormir, intentando calmar a mis demonios y fantasmas, y dormirlos en sus manos. Arrullarlos. Amo a una mujer que no conozco, pero se que existe como mis propios pasos. Una mujer que me regala palabras de aliento sin siquiera mover los labios. una mujer que sin estar me hace ser. Un ser que sin ser siquiera, me hace existir. Una palabra, una sonrisa. Su voz y su cabello me bastan para poder encender de nuevo la luz.

16 jun 2011

Just because you're lovely?...No, just because I love you...


Voy a besarte hasta que mis labios se hagan aire,

Un leve suspiro en la constelación de tus ojos.

Y abrazar en medio del silencio colosal,

Esas dos luciérnagas que iluminan tus ojos

Que evitan que me convierta en polvo.

Arena flotando, que susurra a mis oídos poemas prohibidos,

De esos que un día escandalizaron al mundo antiguo.

Los mismos que usaron palabras obscenas, lascivas, complejas

Para nombrar al amor…

Un amor que apesta el cuarto a flores y cuentos,

Flores que rompen esta inmensa oscuridad

Con el fino brotar de sus pétalos.

Cuentos que me conducen invariablemente

Hacia la eternidad que descansa entre tus piernas.

Y como lagarto predador me arrastro

Hasta encontrar tu secreto mejor guardado

Tu inocencia escondida

Sonrisas puras y nítidas, libres y honestas,

Resguardadas de esta burda humanidad

Como esperando alguien digno para poder contemplarlas,

Tallarlas como diamante en bruto,

Y brillar, brillar, brillar…

Mientras...


Mientras las hojas caen, yo te cuidaré, duerme tranquila...mientras el cielo cae, yo me abrazaré a tus brazos para no naufraguar...mientras mis huesos sigan sonando como sonajas de infantes acabados de germinar, como girasoles girando al compas del movimiento solar, yo te guiaré por un camino menos enlodado, menos empedrado que el de la realidad...mientras mis manos puedan tocar la suavidad de tu vientre, y perderse en la inmensidad irrefrenable de tu piel, ahi estaré colgado de tus abrazos, para nunca marchitarme, para nunca desahogarme como un grito contenido que estalla y se apaga y desaparece...no quiero ser una luz intermitente en la historia de tu memoria...quiero ser un haz de luz que permanece en la oscuridad, venciendo al olvido, arrastrando el tiempo y arrullando la mirada angosta de la tibieza que nos regala la oscuridad, para imaginarnos caminos, laberintos por andar, motivos distancias, acústicos, armónicos...mientras las hojas sigan cayendo en esta espesa sabana del bosque, y truenen como ecos de civilizaciones que se esconden, mis oidos escucharán tu voz como la oración que mis labios jamás pronunciaron, como la fe de los hombres materializada en tus palabras de aliento...mientras mis pasos sigan andando, iré dibujando caminos para andarlos a tu lado, iré caminando sonidos y suavisando la eternidad para asi poder atraparla en una aurora boreal, que baila al compás del movimiento de tu mirada, ondulatoria, hipnótica...mientras tú estes a mi lado , la vida un día será mejor, cuando construyamos un hogar en un árbol, para poder habitarlo, y tomar café siempre, siempre, hasta la noche...mientras existas, yo existiré contigo.

12 jun 2011

El genio de la multitud


Hay suficiente traición y odio, violencia,

necedad en el ser humano corriente

como para abastecer cualquier ejercito o cualquier

jornada.

Y los mejores asesinos son aquellos

que predican en su contra.

Y los que mejor odian son aquellos

que predican amor.

Y los que mejor luchan en la guerra

son -AL FINAL- aquellos que

predican

PAZ.

Aquellos que hablan de Dios

necesitan a Dios.

Aquellos que predican paz

no tienen paz.

Aquellos que predican amor

no tienen amor.

Cuidado con los predicadores

cuidado con los que saben.

Cuidado con aquellos que están siempre

leyendo libros.

Cuidado con aquellos que detestan

la pobreza o están orgullosos de ella.

Cuidado con aquellos de alabanza rápida

pues necesitan que se les alabe a cambio.

Cuidado con aquellos que censuran con rapidez:

tienen miedo de lo que no conocen.

Cuidado con aquellos que buscan constantes

multitudes;

no son nada solos.

Cuidado con

el hombre corriente

con la mujer corriente.

Cuidado con su amor.

Su amor es corriente, busca

lo corriente.

Pero es un genio al odiar

es lo suficientemente genial

al odiar como para matarte, como para matar

a cualquiera.

Al no querer la soledad

al no entender la soledad

intentarán destruir

cualquier cosa

que difiera

de lo suyo.

Al no ser capaces

de crear arte

no entenderán

el arte.

Considerarán su fracaso

como creadores

sólo como un fracaso

del mundo.

Al no ser capaces de amar plenamente

creerán que tu amor es

incompleto

y entonces te

odiarán.

Y su odio será perfecto

como un diamante resplandeciente

como una navaja

como una montaña

como un tigre

como cicuta

Su mejor

ARTE.